Tondeluna es el gastrobar que tiene el cocinero Francis Paniego en Logroño, famoso por su restaurante El Portal del Echaurren de Ezcaray. Aquí presenta una cocina no tan elaborada y creativa como la de El Portal sino más bien en la línea tradicional del Echaurren Tradicción pero por lo comprobado bastante suculenta y conseguida.
Lo primero que nos llamó la atención fue las mesas comunales. La foto es de la primera noche en la que estuvimos y no había más que otros 4 comensales en todo el comedor pero la verdad, será por edad, por cultura o por vete tú a saber pero es un concepto que no nos hace demasiada gracia. De estar el comedor lleno tendrías a otros comensales desconocidos codo con codo escuchando tu conversación y viceversa. Además, el restaurante tiene ya unos precios como para repensar el estilo.
Pero bueno, va en gustos. Otro podría decir que así haces amistades nuevas...
De aperitivo de la casa te ponen este barreño de una magnífica mantequilla pero también creo que no está bien pensado el asunto. Como en ambas noches no había apenas gente te dejaban un rato largo la mantequilla en la mesa hasta que te decían si te la podían retirar ya que era el barreño que ponían a todo el mundo. ¿Y sí está lleno el restaurante? A lo mejor tienen más pero en las dos noches solo vimos uno para todo el mundo. Sería mejor más pero bastante más pequeños en cantidad.
Como aperitivo solo pedimos Las croquetas que mi madre Marisa nos enseñó a hacer. 10,50€. Famosísimas en todo el mundillo gastronómico español. ¿Estaban buenas? Sí. ¿Las mejores probadas? En absoluto. Más bien en la media de croquetas probadas en restaurante. Casi se podría decir que una pequeña decepción viendo las altas expectativas aunque repito que no estaban nada mal.
El nivel mejoró sensiblemente con la merluza estilo Guetaria al horno con patatas panadera. 21.95€. Extraordinaria. Hacía mucho tiempo que no comíamos una merluza tan buena en todos los sentidos: punto, textura, sabor... Hay que probarla.
El nivel alto siguió con otro plato de la madre de Francis y que se puede encontrar también en el Echaurren Tradición y que es la merluza a la romana confitada a 45º con pimientos y crema de arroz. 21,95€. Se le puede aplicar el comentario del plato anterior porque estaba espectacular. Si no es la mejor merluza a la romana que he probado, está entre los dos primeros lugares.
Esta vez no pedimos postre ya que con la comida del mediodía ya teníamos el día más que completo...
La segunda noche no pensábamos ir porque teníamos apuntadas otras referencias en Logroño pero una combinación de salida tardía del hotel, vinos en la zona de la calle Laurel y confianza en que era jueves y no habría demasiada gente en los restaurantes hizo que los dos sitios a los que fuimos estuvieran llenos. A la vuelta del segundo de ellos hacia el casco histórico pasamos de nuevo por la puerta de Tondeluna y viendo que no había nadie y que se empezaba a hacer tarde decidimos volver a cenar aquí.
Al hilo de lo comentado al principio sobre las mesas comunales llama la atención que por lo menos dos restaurantes estuvieran llenos un jueves, alguno peor situado, y en cambio Tondeluna estuviera vacio a las diez y pico de la noche. A lo mejor hay más gente a la que no le gusta ese concepto y evita el restaurante. Por cierto, los tres comensales que entraron algo después que nosotros no iban a tiro fijo y también miraron por el ventanal primero y luego se decidieron a entrar...
Esta vez no pedimos entrante, solo probamos de nuevo la mantequilla, y pasamos directamente a los principales. El entrecot de carne roja con salsa Café de París, 22,50€, estaba impecable, casi la versión carnívora de la merluza del día anterior. Punto perfecto y sabrosísimo. También notable el puré de acompañamiento. Lo único mejorable fue la racanería con la salsa. Se lo comenté al camarero cuando retiró el plato y me dijo que lo hubiera dicho y me hubieran puesto un cazo con ella pero que no ponían demasiada porque a mucha gente no le gustaba.
Desconozco el mecanismo del cerebro que hace
que alguien pida un plato con una salsa que no lo gusta... pero tal vez sea una buena idea poner la salsa en un recipiente aparte para que el comensal se sirva lo que desee.
En cambio, de salsa iban sobradas las costillas de cerdo con salsa de miel de Ezcaray, romescu y berenjenas encurtidas, 17,95€, pero mejor, porque estaba muy muy buena al igual que las costillas. Notable.
Como no pedimos entrantes esta vez sí tomamos postre. Adictivo el chocolate, pan, aceite de oliva y sal con helado de café, 8,95€, de lo mejor probado en los últimos años en chocolate. Si hubiera sido hace años hubiera repetido...
No le fue a la zaga la tosta templada de queso de Cameros, manzana y helado de miel, 8,95€,
magnífico en todas sus facetas.
La carta de vinos es algo rácana. Se pueden encontrar cosas muy válidas pero creo que el restaurante tiene entidad y precios para pedir algo más. Además la segunda noche primero pedimos un tinto y tocando la botella se veía que estaba claramente caliente. Un detalle a mejorar.
Tomamos Viña Gravonia 2007, y Campo Viejo Cava Brut Reserva, una sopresa agradable este último por los 12,50€ que costó.
El personal de servicio correcto y la salida de platos ágil. Tampoco tuvieron mucho agobio precisamente...
La página web bastate buena. Sencilla e informativa. Solo les faltaría colgar la carta de vinos.
La experiencia en conjunto fue muy satisfactoria, con todos los platos rayando a muy buen nivel y saliendo con ganas de repetir en un futuro. Tienen cosas como las comentadas con margen de mejora pero que no ensombrecen lo principal que es la comida. La cuestión de las mesas ya va en gustos, pero en cuanto a la cocina, lo recomiendo sin duda ninguna.
Tondeluna
Muro de Francisco de la Mata, 9, 26001 Logroño, La Rioja
941 236 425 | www.tondeluna.com | |