Llegó el fin del año 2007 y parece que toca hacer balance. Recopilar los mejores momentos. También aquellos que no lo fueron tanto, o donde nos equivocamos. Afortunadamente fueron muchos más los primeros. Al menos los recuerdo mejor. Empezando por este compartir y aprender que suponen los blogs, que me han hecho disfrutar tanto. Me acuerdo de la quedada bloguera en ese maravilloso restaurante que es Diverxo, del embriagador humo de Etxebarri, de la elegancia de Akelarre, de ese fantástico bistró oriental que es Sudestada, de esa cocina de raíces y sensibilidad de El Bohío, de ese otro bistró donde se come tan bien llamado Sacha. Y aquí en la patria chica , todo lo que he disfrutado con la muy personal sabrosura de L’Alezna de mi amigo Martino, de la importancia de los principales en El Corral del Indianu (siempre me digo que tengo que volver pronto, aunque luego no lo haga), de la categoría de la cocina de Casa Gerardo (próximo post), de la desenfadada creatividad de Koldo Miranda. También el buen hacer de tantos sitios que nos han dado tan buenos momentos: La Tabla, Sollun, Casa Camila, Los Tres Caracoles, Los Nogales, ….
Este ha sido el año en que me enamoré del vino. Hasta ahora era algo que me interesaba, pero que no vivía con la pasión de ahora. Quizás haya influido que haya podido probar maravillas tales como los champanes de Krug o Salón, el Valdegatiles y el Llanos del Almendro de la bodega Dominio de Atauta, el Trasnocho de Remírez de Ganuza, el Molino Real de Telmo Rodríguez, el Sassicaia,el Anjou La Lune de Mark Angeli, El Puntido de los Eguren, las sidras de hielo…., También, sin duda, que he aprendido a beberlos y apreciarlos, a disfrutarlos, un poco mejor.
En cuanto a las faltas, reconozco que en algún momento nos ha faltado cintura, sentido del humor , o sobrado seriedad, o se nos ido un poco la pinza con esta cosa del comer y el beber. Nos ha sobrado, también, algún mal modo. Quizás en algún momento hemos emitido opiniones con demasiada ligereza, o nos hemos dado una ridícula importancia. Hacemos propósito de enmienda.
Al año que viene le pido que sea tan bueno como este. Feliz año 2008 a todos.
Este ha sido el año en que me enamoré del vino. Hasta ahora era algo que me interesaba, pero que no vivía con la pasión de ahora. Quizás haya influido que haya podido probar maravillas tales como los champanes de Krug o Salón, el Valdegatiles y el Llanos del Almendro de la bodega Dominio de Atauta, el Trasnocho de Remírez de Ganuza, el Molino Real de Telmo Rodríguez, el Sassicaia,el Anjou La Lune de Mark Angeli, El Puntido de los Eguren, las sidras de hielo…., También, sin duda, que he aprendido a beberlos y apreciarlos, a disfrutarlos, un poco mejor.
En cuanto a las faltas, reconozco que en algún momento nos ha faltado cintura, sentido del humor , o sobrado seriedad, o se nos ido un poco la pinza con esta cosa del comer y el beber. Nos ha sobrado, también, algún mal modo. Quizás en algún momento hemos emitido opiniones con demasiada ligereza, o nos hemos dado una ridícula importancia. Hacemos propósito de enmienda.
Al año que viene le pido que sea tan bueno como este. Feliz año 2008 a todos.
Foto tomada de flickr: http://www.flickr.com/photos/sparkys_pics/271724787/