domingo, enero 29, 2012
En brazos de la Chenin Madura.
La Chenin Blanc tiene parte de la culpa de mi afición al vino, en el mejor sentido de la expresión. Más concretamente un la Lune de Mark Angeli. Un torrente de fruta y naturalidad que no se parecía a nada de lo que había probado antes. Una frescura que invitaba a seguir copa tras copa. Y desde entonces hasta hoy he trasegado cientos de vinos, descubriendo un mundo que solo en aquel momento empezó a vislumbrase. Y por supuesto he recaído con frecuencia en la Chenin Blanc, una uva que siempre se muestra asequible y amistosa. He bebido muchos Chenin Blanc y , salvo alguna botella más decrépita que madura, nunca he dejado de disfrutar ninguna botella compuesta por ella. Es deliciosa en sus vinos jóvenes, cargada de fruta y aromas francos, frecuentemente con un final dulce que enmascara defectos. Pero debajo de ese carácter amable, muestra una sequedad de acero , un otoño de miel y lluvia, y una acidez frecuentemente afilada. Conforme pasa el tiempo, como le pasa a cualquiera , va perdiendo esa inocencia primera y pasan a dominar los caracteres secundarios. Aunque hay tantas Chenin Blanc como vinos , productores y zonas en una zona tan amplia como la que recoje el curso final del río Loira, tiene fama la Chenin Blanc de no tener la capacidad de envejecimiento en vinos secos de la chardonnay. Por eso hablo de chenin madura con vinos de cinco años (aunque luego me encontrase que alguno de ellos era todavía realmente joven). Sin duda le viene bien soportar las inclemencias del tiempo cobijada en un manto de azúcar. Alguna Chenin Blanc he tomado dominada , en el mejor de los casos, por la manzana asada, y en el peor , por los olores de espárrago verde y de cubo sucio de fregar. Pero en manos de buenos productores, es capaz no solo de envejecer bien , sino de conseguir vinos extraordinarios.
He tenido la suerte, recientemente , de tomar alguno de ellos. Uno fue hace ya al principio del verano. Pero intento que no se me borre de la memoria . Un Clos Rougeard Bréze 2000 , en La Cigaleña. Apoteósico. Un vino que reunía lo mejor de los Coulée Serrant que he probado, su fondo atlántico, su susurrante variación , sus notas de otoño, botritys y hojas secas, pero que en lugar de darlo de una forma deslavazada y decadente, se ofrecía con una pujanza integradora, ofreciendo de forma clara y vigorosa cada faceta de la misma. Un vino en el que vibraba esos el “terroir”, una identidad única. Un vino de emoción, delicioso para cualquiera, del que disfruté cada sorbo. 96.
Paco Berciano les dedicó un post. Y estos galos con pinta de Astérix y Obélix algún vídeo dedicado en Youtube de enorme interés para los que amamos el vino
Quizás un paso por debajo quedaron los siguientes, lo que en este caso no significa mucho, porque estaban estupendos. Los tomé con poca variación de fecha.
Uno de ellos fue un Domaine de Bellivière Jasnières Calligramme 2004, un vino del vigneron Eric Nicolás, del que , rebuscando por el interné, me encuentro que es propietario de una serie de parcelas de viñas en Lhomme y Ruillé-sur-Loir, las dos comunas de Jasnières, y también en Chahaignes, Marcon y Dissay-sous-Courcillon, todas las comunas de la denominación Coteaux du Loir, con viñedos de varias décadas de antigüedad, cultiva solo en órganico, con viñedos de alta densidad foliar (y poda severa), arado en caballo de hierbas superficiales (para fomentar el enraizamiento profundo),….todo lo cual se hace notar en el vino, en el cual diría se puede apreciar la tan manida mineralidad. El vino estaba en un momento de fantástico equilibrio, dando con finura lo mucho que tenía: notas leves de manzana asada , de miel, pero con la fruta todavía presente , sostenida por una firme columna de acidez cítrica y por un frescor de piedra caliza. Un vino otoñal en una espléndida madurez. 90
También me encantó revisitar un viejo conocido: La Lune 2006 de Mark Angeli, , enriquecido por un paso del tiempo que transformaba su fondo dulce en mieles , manzanas asadas y diría que un matiz de botrytis, pero sin que le hiciese perder su fondo franco, puro, lleno aún de la vitalidad que me enamoró en nuestro primer sorbo, pero que encuentro más alicaída en las últimas añadas.88.
Radicalmente distinto es su hermano mayor , el Vignes Françaises 2006 de Mark Angeli, el último año antes de perecer asfixiada por la filoxera de una plantación de Chenin Blanc sin injertar. Seco, austero, afilado, compacto, necesitará años para hacerse accesible su acerada y brillante materia. Lo recuerdo invariable en los dos años que me separa de la anterior toma. Lo malo es que me va a ser imposible seguir esa evolución, porque solo tenía dos botellas.88.
Paradigmático en mostrar esa doble personalidad de la Chenin Blanc fue un Domaine du Clos Naudin 1989 Vouvray Moelleaux, elaborado por Philippe Foureau. Por una parte , después de la oxigenación pertinente para un vino que lleva 22 años esperando, muestra un Dr Jeckyl denso , dulce , con abundantes mieles y flores marchitas, botritys, notas de sobremadurez, de uva pasa, incluso de Px, casi un vino de postre,.…pero por otra, muestra un fondo fresco, mineral, una acidez vivaz, y un contrapunto final en boca amargoso,….siendo este Mr Hyde, contra todo el que va apoderándose del vino, haciendo de él una melodía deliciosamente armónica y vibrante. Un Vouvray de los grandes. 94.
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Se echaban de menos los post del jefe y sobre todo su vena poética: "un otoño de miel y lluvia". ;-) :-)
ResponderEliminarPor cierto, ese último vino es "moelleux" que viene a significar en el mundo del vino algo así como "abocado" aunque a los del Loira yo diría que son más bien dulces.
ResponderEliminarCoño. Recuperaste el ADSL.
ResponderEliminarMi primer, y casi único contacto, con esta uva fue gracias a la primera cena, allá por septiembre de 2008, en la que nos juntamos unos cuantos. Fue un Magnum de La Lune 2007, y recuerdo que me impresionó.
Luego pillé dos botellas más de este mismo vino. Una de ellas la bebí en abril de 2009, y no me gustó tanto (un sabor demasiado "fermentado"). Con la otra estoy haciendo un experimento de resistencia al tiempo, viendo que algunos le estais dando ahora al 2006, creo que esperaré al año que viene... a ver cómo se porta.
DE ese Calligrame Belliviere habló Jorge aquí hace no mucho tiempo.
ResponderEliminarA mi me gustó mucho en su día, todavía se pueden conseguir botellas por aquí, creo.
A los vinos de Mark Angeli les tengo ganas pero aún no me probado nada.
Hola,
ResponderEliminarun buen momento para hablar de Chenin Blanc, pues este fin de semana ha sido el Salon Grenier St. Jean (organizado por Mark Angeli para vinos orgánicos - biodinámicos) y la semana que viene será el Salon des Vins du Loire.
Una novedad: es cierto que las Vignes Françaises de Mark Angeli, que estaban plantadas en la misma finca en ladera de la que procede Les Vielles Vignes des Blanderies, sucumbieron a la phylloxera y la última añada fue 2006.
Pero, la buena noticia es que Martial Angeli (hijo de Mark), que se ha incorporado a la bodega, se ha decidido a plantar una nueva finca en pié franco. En esta ocasión, una finca de suelos arenosos donde la phylloxera tiene más difícil desplazamiento. Si todo va bien, se plantará esta primavera y, transcurridos tres años, supongo que con la añada 2015... tendremos el nuevo Vignes Françaises en el mercado.
Saludos!
Santi, gracias por las informaciones.
ResponderEliminarSin duda es una uva sugerente. No destapa las cartas pronto, parece que va a ser otra cosa y luego... Eso sí: al final siempre seduce si está bien. Ahora, no sé si es la uva o son los productores pero me he encontrado con más botellas fallidas que en otros casos. ¿Demasiado delicada? No lo sé, pero merece la pena por tantas buenas ocasiones.
ResponderEliminarRecién retornado de Bilbao os diré que me gustó mucho la exposición de Antonio López (el pintor, no Lolo, el nuestro) y que la comida en Mina, en compañía de Albertobilbao, fue de lujo. Haré un post sobre ella, aunque hay cola.
ResponderEliminarAparte, visitamos los bares de vinos más dignos de la ciudad, ya conocidos: el Singular, con sus apuestas foráneas, y El Viejo Zortzi, con su carta de vinos coherente y bien pensada. Y la novedad para mí: el Wine Bar. Aparte de lo poco que me gusta el nombre -cada idioma en su sitio- me parece una buena idea que al final está mal resuelta. Máquinas para la conservación y servicio del vino nada menos que con 32 referencias abiertas, tres opciones de bebida (copa, media copa o degustación mínima), sistema de pago con tarjeta propia, productos selectos para acompañar si se quiere, buena ubicación, céntrico y en zona ya ambientada... Dejo aparte al público, que es muy diferente a mi gente. Dejo aparte que la decoración me agrade más o menos. Dejo aparte que ese sistema de tarjeta (fianza de dos euros y carga mínima de diez) no sea práctico para el visitante ocasional o de paso. Lo que me desencajó del todo fue que me costó trabajo encontrar un vino que me apeteciese entre los 32. La selección está cargada de vinos del "nuevo mundo" baratos pero con poco que contar y reforzada con vinos muy caros o prestigiosos para tentarte con la posibilidad de tomar una copa (p.ej. un Valbuena) y por el camino, en mi opinión, se han olvidado de la posibilidad que una instalación así ofrece de abrir vinos realmente emocionantes y diferentes, sin riesgo grave de que se estropeen o no se vendan. En fin, va en gustos.
Jorge, sin querer defender a los hosteleros hay que reconocer que guste más o menos los hay que tener bien puestos para poner un bar de vinos del estilo del que nos hablas. Vuelvo a recordar al difunto Melibea y la cantidad de botellas de vinos "raros" que me abrían a mi y según me contó el que lo llevaba, difícil era que vendieran una copa más.
ResponderEliminarPrecisamente por eso procuré describirlo con detalle, Toni. En este caso lo que tiene bien puesto es el capital, o los avales, porque aquello no es barato de montar. Ya que cuentas con esos medios, aprovéchalos. Si un vino de una zona española que no empiece por erre es difícil de vender ya imagino yo la salida que pueden tener en el mismo Bilbao vinos neozelandeses o californianos, además de algún español sin erre que también había. Así que ya lanzados a la aventura apuesta fuerte y haz también un trabajo de divulgación. Vamos, que es una selección que no atrae a "clasicómanos" ni a maníacos del vino.
ResponderEliminarY se me había olvidado contar otro pequeño detalle de Bilbao, una "infidelidad". Esta vez pude traer queso de La Petite Fromagerie (bénditas temperaturas frías). Un Ossau que está bueno pero del que esperaba más, un Munster de esos que espantan a Antonio López (a Lolo, el nuestro), una Torta del Casar de Rafael Pajuelo, que todavía no he probado, y un Banon pequeño pero matón, del que regalé un gemelo a un amigo que aún no me ha dicho su impresión. Me parece que tienen suerte en Bilbao con un proveedor así. Y también me parece que nosotros no podemos quejarnos con los nuestros ;-)
ResponderEliminarhttp://www.azti.es/destacamos-home/mugaritz-y-azti-promueven-la-primera-revista-internacional-que-auna-ciencia-y-gastronomia.html
ResponderEliminarAlgún alma caritativa que ayude a este pobre hombre a encontrar alguien que afile cuchillos en condiciones en Oviedo...
ResponderEliminarHay uno muy bueno en Gijon, un poco mas allá de tienda de Germán, pero me pilla un poco mal para ir ahora.
Mis cuchillos dan pena ya y necesitan algún no bestia como yo que los afile bien
Por cierto Jorge, dile al munster ese que la próxima vez que nos veamos tal vez no le sea tan fácil derrotarme.
ResponderEliminarTe tengo ganas munster ;-)
Yo buscaría "enchufe" con algún hostelero que los afile en sitio fiable. En su momento me hablaron muy bien de Atenor. Si consigues que algún profesional cuele los tuyos en el lote y luego arregláis cuentas...
ResponderEliminarJe, je... Al mío ya casi no se lo puedo decir. No sé con qué parte escucha un queso pero seguro que ya me la he comido.
ResponderEliminarCreo que atenor e Oviedo cerro
ResponderEliminarDos cosas:
ResponderEliminar- No me creo que ninguno de vosotros no haya dado ya buena cuenta de esa sidra de pañada tardía que hace German, "Tres el Llagar". Me extraña que no hayais puesto vuestras impresiones por aquí.
- Este fin de semana voy a estar por Lugo capital (iba a poner viaje de divertimento, pero habiendo futbol por medio...).
Ya ví que están posteaos el ESPAÑA y el PAPRICA. Pero yo busco sitios más "populares", tanto por precio como por oferta. Vamos, que si sabeis donde comer buenas raciones de pulpo y demás por allí, se agradecería la información.
Compangu, la Tres el llagar, cuando aún no tenía ni nombre, la probé con German y su elaborador en la cata de quesos de Guillermina, que también esta "posteada". Es muy interesante aunque hará dudar a muchos. En el fondo es una sidra muy noble, como debería ser una buena sidra natural. Sin embargo, para su elaborador -que hace sidra- fue un descarte, una pipa fallida. Entonces fue cuando Germán decidió "adoptarla" como uno de sus "Raros de rara". Total, que nos encontramos ante una sidra amarilla dorada, limpia, muy franca en nariz con notas que nos sugerirán lo dulce, aunque no es en absoluto una sidra dulce. Son notas de sobremaduración justa, de sabores otoñales. Su comportamiento en la copa está a caballo entre la sidra natural y la "de mesa": presenta notas en nariz y boca de lo que es, de natural, pero tiene el carbónico mucho más integrado, al estilo de las de mesa. En resumen, recomiendo probarla a cualquier sidrero porque probablemente le gustará y le hará pensar, pero después debe pensar que está ante algo exclusivo, único y seguramente irrepetible, así que será, como sus hermanos vinos de esa serie, efímero. Eso justificará que pague un precio bastante más alto por una "simple" sidra natural.
ResponderEliminarTras tomar notas para mis posibles incorporaciones vinícolas y envidiar el feliz destino de Jorge Díez -que ganísimas de volver a Bilbao!-; no he tenido más remedio que partirme la caja con el tema Afiladooooooooooor!!!
ResponderEliminarYo tengo un cuchillo semidecente; pero, como la piedra me sale tan cara como el hierro; se lo llevo a un conocido una vez al mes. Creo que paso más tiempo en su cocina , que en la míaa :-)
Saludo a tol mundo,..-
Muy interesante el nuevo post, después de mucho tiempo, del Gourmet del Prado.
ResponderEliminarExcelente el Amancio 2005 de Sierra Cantabria, aunque por lo que cuesta ya puede...
ResponderEliminarBueno, ayer fue el aniversario del Naguar. ¿Nadie ha estado en la fiesta para contarnos algo?
ResponderEliminarNadie???
ResponderEliminarSeguro que estuvo medio Oviedo...
Yo voy este finde al maravilloso Brunch
Algo reseñab le o algún pincho bueno del campeonato de Asturias de este año????
ResponderEliminarNi idea Lolo. A mi me da la impresión que tenemos un campeonato de pinchos permanente. ;-)
ResponderEliminarOtro vino excelente y bastante más barato que el Amancio es el Finca Sandoval 2007. Totalmente recomendado.
ResponderEliminarInteresante lo que cuenta Encantadísimo sobre un restaurante que no tiene teléfono, no tiene aperturas fijas y no sabes lo que vas a comer ni beber ni a pagar. ¡Viva la excentricidad!.
ResponderEliminarLa que tuvo que liar el que nosotros sabemos en Lugo!!!!!!!!
ResponderEliminaraloque
Eso digo yo. ¿Tenemos alguna baja entre los nuestros? ¿Alguien rodó por el cesped del estadio Ángel Carro? No me gustaría empezar así la semana, vaya.
ResponderEliminarClaro que también puede haber rodado alguien por una barra de Lugo, vete a saber.
El fútbol, ese duro deporte...
ResponderEliminar:-)))
Durísimo, Jorge, durísimo.
ResponderEliminarPulpo buenísimo y asequible: en O XUGO
Buenísima la miel de los amigos de la puela, de Cangas de narcea.
ResponderEliminarhttp://www.mieldelapuela.com/
En la web creo que no viene, pero a la que me refiero es a la ecológica, la mejor miel que probé en un tiempo.
Y la compro en la flor de anís, en Avilés, donde el mercado, mi tienda de cabecera de frutas, verduras y productos ecos
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ResponderEliminarLa Torta del Casar de Rafael Pajuelo está demasiado buena: incita a comer en exceso.
ResponderEliminarPor otro lado, el Sketch 2008 es uno de esos vinos "de aquí" que prueban que se pueden hacer las cosas muy bien si se quiere. Complejo; nariz grata, madura, acorde con el bello matiz dorado del color. Al tercer día mostraba atisbos de oxidación muy noble e incipiente. Grande, sabroso y elegante, todo en uno.
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ResponderEliminarJorge recordaba q en una cata casera hace mas de 6 meses no nos había convencido del todo, a ti también te había pasado?, mejoró o está en misma línea?.
ResponderEliminarDe todas formas a mi me parece un vino para mas adelante.
Perdón por el retraso en contestarte, Sibarita. No recuerdo muy bien la cata a que te refieres, pero en esta ocasión el vino estaba muy bien, así que podría ser cosa de cada botella. Me extraña tanto cambio en poco tiempo aunque nunca se sabe. Por otra parte, a mí me parece que está en muy buen momento para tomarlo. En cambio me sigue costando trabajo apostar a ciegas por el envejecimiento de los vinos españoles, no sabría qué decirte sobre lo de guardarlo.
ResponderEliminarEsas disculpas tengo que hacerlas extensivas a quienes estén esperando por post anunciados. Una serie de cambios laborales me tienen absorbido pero no los he abandonado. En cuanto tenga tiempo los iré sacando.
ResponderEliminarHoy comí un menú que me presto un mundo.
ResponderEliminarFuimos a la nieve a san Isidro y comimos en felechosa, en el molin d'eloy, me gusto mucho, buena cocina y muy buenos postres. 15 euros
Seis primeros a elegir y seis segundos.
El restaurante muy guapo y buen servicio. Buena bodega para lo que es la zona.
Realmente sorprendente
Coño Lolo, ese es mi sitio de cabecera muchos fines de semana a las 4 de la tarde cuando bajo de fuentes....
ResponderEliminarY además lo lleva una gente muy maja.
Cansado del torres y sus precios excesivos......
Saludos.