Como ya dije por aquí , el domingo 17 de enero, osea hoy, estuve de jurado en el I Concurso Provincial de Casadielles, organizado por la Hermandad de la Probe en La Foz de Morcín. La casadiella es una masa hojaldrada, unas veces más masa , otras más hojaldre, con un relleno de nuez , al que se le puede añadir avellana (también pueden ser solo de avellana, pero son raras de ver), anís (a veces con un poco de vino) y azúcar, que también se espolvorea. A mi gustan mucho y las prefiero al carbayón y empalagoso Carbayón. La masa suele estar frita, aunque también puede hacerse al horno. Me parece un buñuelo pasado por la idiosincrasia de Asturias, donde la Teresita sería su transición. Me encanta la fritura con el hojaldre, que es darle suculencia a lo etéreo, pero en las masas más aéreas se corre el peligro de que el aceite traspase con facilidad las capas más superficiales y desbarate el conjunto con sus excesos . Quizás por eso no abundaron en el concurso, donde se recurrió sobre todo a la más manejable y compacta masa tipo empanadilla. Supongo que una casadiella perfecta debe tener una presencia un poco irregular pero no demasiado, un color entre el dorado y el ocre, una masa bien frita y totalmente cocida, pero no demasiado, donde puntuará al alza su carácter hojaldrado y su engarce con el relleno, que a su vez deberá ser sabroso pero equilibrado. El concurso tuvo la virtud de ser de preparaciones caseras , con lo que ello supone también de riesgo, sobre todo en los excesos de aguardiente, o en el afán de ser originales desviándose demasiado de la sencilla receta original. Uno sabe poco de Casadiellas, como de tantas cosas, pero al final, como suele pasar con los pinchos, o con los vinos, lo bueno suele ser reconocible y poner a todos de acuerdo.
En Oviedo me gustan mucho las de dos pastelerías clásicas : Rialto y Camilo de Blas, y las de Santa Teresa, todas ellas en esa línea de hojaldre frito al que hacía referencia.
Foto tomada del blog Lacuinadecasa , que es imagen de mi casadiella perfecta (falta comerla, eso sí), y que de paso habla de su paso por Camilo de Blas
Bien, veo que sigues en forma y has salido indemne de esa fartura.
ResponderEliminarLes casadielles no son uno de mis dulces de cabecera pero por anotar alguna cosa también prefiero las más hojaldradas. Y la avellana mejor reservarla para otras elaboraciones; la casadiella, de nuez (y el puntito de anís, no excesivo pero imprescindible) Una de las razones por las que no me engancho mucho a este dulce es precisamente porque sigue pesando su tradición humilde y casera. Es decir, no acabo de pillarle el gusto a la casadiella como elaboración confitera, y como no tengo la abuela en el pueblo manteniendo la repostería tradicional pues... Vamos, para los no asturianos, que la casadiella se ofrece en casa pero no es nada "cool" presentarse de visita con ellas como detalle. La casadiella, lo más hogareña posible y con su marca de aceite en el papel.
Ah, tampoco yo soy muy devoto de los carbayones ;-)
Sibarita, por lo de Lolo en el final del post anterior: a mí también me gustó el Maduresa cuando lo probé. Lo que no sé si te anima más o todo lo contrario ;-)
ResponderEliminarY aunque la celebración canónica de San Antón la hice ayer -a la que dedicaré un próximo post- andaba yo hoy dubitativo acerca de cómo rendir un homenaje más modesto a esa festividad cuando veo en el menú de la Marea Baja manos de cerdo. ¡Allá vamos! Tibio que me puse, oiga, y hecho un experto en traumatología porcina de tanto apartar huesecitos.
ResponderEliminarY ahora lo de siempre: me llama el deber.
ResponderEliminarAmarilla y en botella...
Al final tomé lo menos posible de cada casadiella. Así que saldría a entre tres y cuatro, por lo que no fue para tanto.
ResponderEliminarJorge, veo que te gustaron las manitas. La verdad es que entre lo poco aprovechable, lo dificultoso y la cantidad ingente de gelatina que gastan, a poco que no estén bien hechas se me hacen muy difíciles de comer
Jefe, cuidao con la glucosa después de este festival azucarado. ;-)
ResponderEliminarFín de semana en Madrid. Estuve cenando en Astrid y Gastón y Dassa Bassa. No hago post del Dassa ya que no tengo los nombres de los platos. :-( Para otra vez llevo la cámara aunque sea para fotografiar la carta. Bastante bien en los dos sitios. Mañana con más tiempo hago un pequeño resumen.
Encuentro gran diferencia entre el hojaldre casero y el que se puede comprar en el súper. No es que éste sea malo, es más, da mucho juego -uno se puede hacer una pantxineta en un plis-, pero cuando es casero y está recién hecho, es absolutamente delicioso.
ResponderEliminarYo pensaba que las casadiellas eran siempre de Nuez.
ResponderEliminarDe las compradas no me gusta ninguna, tambien es cierto que crecí en el pueblo con las echas en casa y siempre me encantaron.
Yo las hago de vez en cuando, evidentemente de masa y no de hojaldre y quedan muy bien. Lo peor en darles una forma regular y hacer la masa fina, pero de sabor muy bien.
Jorge, siempre me animo a proboar dentro de lo posible lo que le sgusta a los demas, nunca se sabe lo que se puede descubrir.
me encantan las casadiellas y me gustan mucho con un puntin de avellana tostada, la verdad es que la avellana me gusta en casi todo jeje
ResponderEliminaroye, pa comprar algun riesling baratin de diario en oviedo?? es que los del club del grumete ya me los conozco y a gijon me aborrece ir
ando perdido
Prueba en Moutas a ver si tienen alguno.
ResponderEliminarlolo,saliendo por la gruta hacia grado,hay una tienda a mano izquierda.no tienen mucho pero algo hay.en la de campoamor creo q no hay.
ResponderEliminarLa mantequilla salió rana. En estos casos me acuerdo de aquel conocido que decía aquello de que lo artesano ni era arte , ni era sano.
ResponderEliminarSi me cuesta hacer una masa de piza casera, ni me imagino lo que tiene que ser la de hojaldre.
estuve en moutas, donde la gruta
ResponderEliminarhay 3 rieslings basicos, sobre los 12 euros.
2 trocken y el que yo cogi, un scholoss lieser 07, del mosel, kabinet, 9º
a ver si esta noche le damos madera que ya tengo mono
Estuve el sábado en el restaurante madrileño Dassa Bassa. Llama la atención su situación en una antigua carbonera y da guso que no haya coberura de móvil.
ResponderEliminarDe aperitivo nos pusieron un "esférico de Campari con Sprite" que parecía un tomate cherry y un "Capuchino: crema de ave con tapioca y espuma de Parmesano". A la vista parecía eso, un capuchino y estaba bastante bien. De entrantes unas "alcachofas con almetjas y foie" bien aunque el foie no pintaba mucho y un "steak tartare" con un helado que no recuerdo bien. Notable el steak pero sin llegar al sobresaliente.
De principales un magnífico "cochinillo confitado a la naranja" y un también muy bueno "rabo de toro al vino tinto en crepineta y garbanzos guisados". Precios sobre los 26+IVA que no hay manera que nuestros hosteleros cumplan con lo legal.
Los postres fueron tal vez lo más flojo. Uno de chocolates y otro unas galletas y algo más que no recuerdo. Caros, 9+IVA.
Buenísimo el vino chileno Kuyen 2005 aunque marcado caro: 40€+IVA. Andaba en tienda por los 25.
No estuvo mal pero me esperaba más.
El viernes fuimos al Astrid y Gastón que le había gustado mucho a la jefa de la anterior visita. Esta vez comimos el "menú tradición". Coincidieron un par de platos con el menú degustación del año pasado, el "Cebiche Clásico
ResponderEliminarde corvina con leche de tigre clásica, cebollas moradas, ají limo y cilantro" y el "Ají de Gallina Antiguo guiso limeño de pollo de corral, leche, queso, nueces y papas".
Muy ricos los "Anticuchos y Papa Rellena de corazón de ternera y papa rellena de ternera, pasas y aceitunas" y notable el "Lomo Saltado, tiras de solomillo al wok con cebollas moradas, tomates y papas fritas" un claro guiño a la cocina oriental. Lo más flojo el postre, "Picarones Tradicionales
con miel de especias y helado de nata" todo algo empalagoso.
Este menú sale por 48+IVA, claro.
A ver si en una escapada a Madrid le doy un tiento a Astrid y Gastón. Por lo que cuentas no está mal.
ResponderEliminarY ese Kuyen, en alguna añada anterior que probé, también me gustó bastante.
Por cierto, el queso Pico Melero evoluciona muy bien en unos pocos días en casa en cuanto lo sacas del vacío. Me da pena acabarlo ya.
ResponderEliminarDe lo que vengo alucinado es el despiporre y permisividad que tienen en Madrid con el tabaco. Es un desmadre total. Vi fumar en bares de más de 100m2, pastelerías, heladerías, centros comerciales como el ABC de Serrano, en el Metro, máquinas expenderoras en la calle y sin mando, etc, etc. La leche...
ResponderEliminarBuenos días,
ResponderEliminarAquí se fuma hasta en mi casa en el desayuno, y puros habanos enooooormes.
Creía que Astrid y Gstón era más caro, la verdad.
si fuera solo con el tabaco...
ResponderEliminaren madrid vale joer, que pa eso es la capital
por cierto, hoy en el carrefour vi un rodaballo enorme, al final se vino pa casa y peso 2.500
no sabia que los habia tan grandes de pisci
se les debio colar porque nunca vi uno tan grande en un super
Muy buenas,necesito sitios en LA CORUÑA!!! para un amigo.ALOQUE
ResponderEliminarY DESEO UNA PRONTA RECUPERACION A COMPANGU QUE ADEMAS ES SU CUMPLEAÑOS.
¿Qué le pasa a Compangu?
ResponderEliminarAloque mira en el buscador de provincias a la derecha del blog.
ResponderEliminarAloque, Coruña hace tiempo que no la visito, no puedo ayudarte.
ResponderEliminarY estoy como Toni. ¿Qué le ha pasado a Compangu? En todo caso, que se recupere. Y aunque sea difícil así, supongo, feliz cumpleaños.
Gracias aloque. A parte de la información que puedas sacar de lo aquí escrito, a ver si J L Louzán se pasa, y te dice algo.
ResponderEliminarPues Toni, me pasa que terminé los 36 fracturando el maleolo de la manera más tonta, un tropezón... y una buena temporada escayolao.
Por cierto, el día del concurso salió en la PTPA el jefe de todo esto, muy bien parecido por cierto.
Ayer, nueva cata ciega entre amigos, que resultó tener un eje atlántico vertical. Además de varios comentarios acerca de las distintas perspectivas sobre el vino (de distribución, de hostelería y de consumo) el juicio del paladar. Otra vez hubo bastantes coincidencias. El Ultreia de Valtuille 2007 fue el ganador y se le concedió un accesit por su potencial para un futuro al Massuria 2007. Misma añada y ambos Bierzo D.O. pero uno totalmente hecho ya y el otro verde, verde, aunque una promesa. (¿Eso será un brote verde?)
ResponderEliminarCon los demás ya no hubo tanto consenso aunque todos tuvieron su pequeña aceptación como vinos sin pretensiones pero ninguno acabó por convencer. Ni el escasísimo Val Nuevo Selección 2004 (Toro) ni el Mesopotamia 2005 (Arribes del Duero) ni el Castro de Limes 2008 (Cangas)
Eso sí: al pasar el corrector de la RCP, una vez desvelados los precios, casi nadie se animaba a comprar alguno. (Yo si le daría la oportunidad al Massuria)
Compangu, vaya putada hombre. Bueno, ya que es inevitable disfruta lo que puedas de la inactividad laboral. ;-)
ResponderEliminarBuen resumen el de Jorge de la cata. Añadiría que los 2 más valorados estaban excesívamente jóvenes y poco disfrutables ahora.
ResponderEliminarYo ayer también estuve en una cata por Gijón. Como había algún remanente de otras nos lo montamos a lo grande:
ResponderEliminar. Un Champagne de Marc Hebrart en magnum del 76, degollado en 2009,maduro,conjuntado, fantástico (89/100), , un Silex 2005, extrañamente opulento, aunque preciso y de fondo mineral, pero mucho menos visceral que el recuerdo de La Cigaleña.Sin duda joven , por otra parte (83/100). Como también lo fue un Batard-Montrachet 2007, que dejó, sin embargo , un recuerdo por su extraordinaria elegancia y pureza (85/100). Luego fue un Haut Bailly del 1989, donde se adivinaba un fantástico vino bajo unas notas de reducción y , sobre todo , oxidación, a cerrado y a cartón mojado, que no dejaban disfrutarlo como se merecía. Un Guigal La Landonne 2004 que me descolocó, porque me encontré un vino de corte clásico, fino, con un acidez perfecta, cargado de excelentes maderas nuevas. UN vino muy vinoso, de una enorme clase, pero que tomamos demasiado joven, y del que esperaba otras cosas (85/100). Y acabamos la fiesta con un Quarts du Chaume de 1990, complejo en su ligereza, perfecto en su conjunción de botritys, dulzor y acidez, pleno e su madurez, que me encantó (87/100). UNa muy buena cata, donde solo nos faltó el sobresaliente, aunque el champagne se acercara.
Qué cosas tan buenas te tomas, Dile.
ResponderEliminarYo sólo puedo hablar del champagne que me tomé hace unos días, uno de los que tenía en casa, L.Bernard- Pitois, el Brut Reserve. Me gustó mucho, nada dulzón, sino todo lo contrario, muy bien para comer. Ese ramo de novia marchito o más bien espachurrado entre las manos, que tiene más tensión emocional. En fin, yo me lo bebí con salmón ahumado y terminé tomándolo con un Comté, y no me pareció mal, aunque pueda parecer "raro".
El otro dia abri un PIERRE GIMONNET SPECIAL CLUB MILLESIME que estaba genial,yo de esto no se demasiado pero me gusto mucho.No comi nada,solo bebi.ALOQUE
ResponderEliminarVaya forma de meter la pata, Compangu.
ResponderEliminarA recuperarse pronto.
El 2001 de Guigal en La Landonne está estupendo, doy fe. Es un extraordinario vino que requiere de tiempo y botella, gran complejidad.
ResponderEliminarBuenas tardes
ResponderEliminarLimonta
Tomo nota de ese champagne
Dile
Baumard es muy grande, es elegancia pura
Saludos