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viernes, julio 08, 2016

Lani's Cafe & Restaurant (Puerto del Carmen, Lanzarote)



 Después de varios días en Puerto del Carmen y ya habiendo comprobado el nivel de la restauración de la zona, dominada por restaurantes indios, asiáticos de fusión, pizzerías, etc, nos dio por consultar una conocidísima web de opiniones de hoteles y restaurantes para ver si podíamos cenar en algún sitio que mereciera la pena.
Aparentemente por todas las opiniones con la máxima calificación, ese sitio era el Lani's Cafe & Restaurant ya que casi el 100% de opiniones eran muy positivas.


No seré yo quien ponga en duda la opinión de tantos comensales que tan buenas críticas y puntuaciones dan a este restaurante pero hay que tener en cuenta algunas variables que probablemente influyan en tan magníficas opiniones.
Una es la extraordinaria situación del restaurante a la misma orilla del mar. Si a esto se le suma que supongo que el 99% de comensales están de vacaciones, como fue nuestro caso, el peloteo del personal con la clientela y sobremanera con la clientela extranjera y la comparación del comedor con el de la mayoría de los garitos de la vecindad, en la que sale indudablemente ganador este restaurante, tenemos el coctel perfecto para salir casi levitando si no eres exigente gastronómicamente hablando.

En nuestro caso no fue así.

Según te sientas te sirven una copa de espumoso, muy buen detalle sin duda, pero que estaría mucho mejor si no hubiera estado casi a temperatura ambiente. Es difícil mantener la temperatura del espumoso fresca en un sitio como Lanzarote evidentemente, pero si haces algo procura hacerlo bien.

También nos pusieron unas croquetas, creo recordar, de jamón con plátano bastante buenas, hay que reconocerlo.

La carta es muy amplia. Demasiado. Tantos platos parece difícil que pueden salir perfectos todos.

De entrada pedimos el surtido de quesos con tostas y frutos secos. Le preguntamos al maitre si los quesos eran de la isla o por lo menos canarios ya que en la carta no ponía nada. Nos dijo que sí, que eran canarios...
Si de algo comemos en abundancia cuando visitamos las Canarias, aparte de las papas con mojo, es de los fantásticos quesos de las islas y me resulta muy difícil creer que lo que había en el plato tuviera nada que ver con las Canarias ya que uno era el típico queso de cabra de rulo de lo más barato que te encuentras en un supermercado de descuento, otro un semicurado del montón y el otro ni me acuerdo pero malo tirando a muy malo. A años luz de los excelentes quesos probados en la isla. Claro está que no puedo asegurar que los quesos no fueran canarios pero tanto como si lo eran como si no, la calidad era mala.
Por lo menos tuvieron el buen detalle de no cobrarlos después de escuchar nuestra respuesta a la pregunta de qué nos parecieron...

Para los platos principales nos decidimos por pescado. El cherne con crema de tubérculos,  no estuvo mal. Bien de punto y sabor aunque algo escaso de cantidad y más comparado con otros restaurantes más tradicionales de la isla. Lo que no entendimos bien es que además de las cremas de tubérculos pusieran papas también todo mezclado. Redundancia.

El otro pescado que pedimos fue atún rojo del día. Como diletante reconocido que soy en esto de la gastronomía tampoco  puedo asegurar contundentemente que lo servido no era atún rojo, pero he comido bastante atún rojo estos últimos años en las propias Canarias, Croacia, las Azores y por supuesto, Cádiz, como para sospechar que por textura y sabor este era alguna especie de las que se comercializan como tal, como albácora, atún de aleta amarilla, patudo, etc. No apostaría el sueldo del mes pero si hubiera habido alguna forma de comprobarlo in situ no creo que me hubiera equivocado. Y si lo hiciera y sí hubiera sido atún rojo sería entonces porque la preparación estropeó totalmente el atún. Fuera lo que fuese, el peor atún que recuerdo en mucho tiempo.
Otra cosa mejorable es que el acompañamiento era prácticamente igual que el del cherne. Un poco más de imaginación, por favor.

La carta de vinos sí que está bien y con una buena selección de vinos canarios aunque tuvimos la mala suerte de pedir una auténtica castaña como el Rubicón Malvasía Volcánica 2015, un brebaje en el estilo de lo peor de Rueda, que parecía un zumo de maracuyá, platanito y piña colada. Alguien podría preguntar que por qué no lo devolvimos, y no lo hicimos porque el vino no tenía defecto de conservación ni nada por el estilo. Era muy malo de por sí y de tal cosa no tiene ninguna culpa el restaurante.

No pedimos postre y nos fuimos para no volver más.


Lani’s Cafe Restaurant

Av. de las Playas, 26, 35510   Puerto del Carmen (Lanzarote)
http://www.lanissuites.com/accommodation/el-restaurante/

lunes, junio 30, 2014

Solana (Santa Cruz de Tenerife)



De los restaurantes probados en nuestra pasada estancia en Tenerife y La Palma, sin duda el mejor y con diferencia resultó ser el Solana, situado en el centro de la capital tinerfeña. Regentado por Nacho Solana a los fogones y Erika Sanz en sala, encontramos una cocina de la tierra pero acertadamente modernizada.

Uno de los dos fallos que observamos en el restaurante fue el que en la carta no está incluido el IGIC en los precios como es preceptivo por Ley. Como ya dije en el anterior post es algo todavía bastante común en Canarias por lo que pudimos comprobar, algo que en la península poco a poco se va viendo cada vez menos. De todas formas es un detalle a corregir.



Tienen una carta amplia pero sin exagerar y como fuimos tres noches pudimos probar varias cosas.



Como aperitivo de la casa nos pusieron un platillo con unas cortezas, chupito de sandía y creo recordar unos dátiles.







Probamos tres de los entrantes. Muy rico el huevo a 63º frito con papa negra, 5,35€, lograda interpretación de algo tan aparentemente sencillo en el que el huevo venía recubierto por la papa manteniendo todo su sabor. 





Resultón el maki negro de atún rojo, 3,75€, en el que lo único que me chocó es que llevaba tinta de calamar que en absoluto notamos, sobre todo yo que tengo lo más parecido a un detector de tinta.





 Acabamos con un guiño a la cocina tradicional canaria con el queso asado con costra de mojo de hierbabuena y miel de palma, 2,14€, estupendo.






Referente a los pescados probamos dos distintos en dos preparaciones también. Fantástico el cherne negro con costra de tomate y mojo verde.  24,61€. Abundante ración de un sabroso  e intenso cherne, perfecto de punto acompañado de una rica costra de tomate y el toque local del mojo verde. Excelente plato.


 
El otro pescado fue el pámpano, escaldón, papa negra, mojos y calamar sahariano.   €. Muy rico también aunque nos gustó algo menos que el cherne. El acompañamiento claramente canario, con un rico escaldón de gofio y las ineludibles papas y mojos esta vez completados por los calamares. Otro plato para recordar.






También comimos el pámpano con la preparación de la costra de tomate.





 Y de los platos de carne probamos tres de ellos. Excelente el cordero lechal con jugo de caldereta y croquetas de papa bonita, 24,61€, perfectamente hecho sin el destrozo de muchos sitios, intenso de sabor, con unas resultonas croquetas y un sabroso jugo. 





Otro acierto fue el cochinillo confitado 52 horas con espuma de papa y curry de plátano. 24,61€. Se le puede aplicar el comentario del cordero y añadir lo bien que le venía el toque del curry de plátano junto con la espuma de papa. Muy rico.




 
Y acabamos con el steak tartare con helado de mostaza dulce y trufa negra, 25,68€, que hay que pedir por encargo y que nos pareció el mejor que hemos probado en bastante tiempo, gran calidad de la carne y perfecto de aliño. Excelente.





 Aunque los años van pesando y ya no comemos como antes, no nos resistimos a pedir postre. Logrado el soufflé fluido de chocolate caliente y sorbete de mandarina y cobre, 6,95€ con el original aporte de este último.



 


 Fresco y resultón el yogur de aguacate, fresas y sorbete de naranja 
sanguina, 6,95€, 

golosa la tropical sopa de papaya, mango y parchita con helado de vainilla. 6,95€.









y original la tarta fina de plátano con helado de vainilla, 6,95€.







 
La carta de vinos muy bien escogida, con muchos de los vinos de moda de bastantes zonas y por supuesto una representación de los vinos tinerfeños que, cómo no, fueron los que escogimos. Los tres de la fantástica bodega Suertes del Marqués que tuvimos la fortuna de visitar. Vidonia 2012, 23,54€, Trenzado 2012, 22,47€  y Candio 2010, 29,96€.



 


Para acabar, sirven unos ricos petit fours.

 
El otro fallo consiste en la ausencia de página web, o por lo menos yo no consigo encontrarla. Sí, tienen página de Facebook pero no es lo mismo que tener una web con toda la información.

El personal de servicio de sala es la propia Erika que es capaz de manejar ella sola la sala con soltura y sin demoras, mejor que en muchos sitios con varios camareros y además es simpática y cercana.

Sin duda Solana es un restaurante de visita obligada para el aficionado a la gastronomía que se acerque por la isla. Cocina autóctona, con los toques necesarios de modernidad, respeto al producto y platos sabrosos.

Y volviendo a antiguos posts, recupero la frase que muchas veces digo: lástima que nos quede tan lejos.

Solana

Calle de Perez de Rozas, 15, 38004 Santa Cruz de Tenerife
922 24 37 80

sábado, junio 21, 2014

La Placeta (Santa Cruz de la Palma)



Los pocos lectores habituales del blog conocen más que de sobra la denuncia que llevo haciendo todos estos años de los restaurantes que incumplen la Ley y no incluyen en los precios de su carta los impuestos obligatorios, IVA o en el caso que nos ocupa de Canarias, IGIC.
Afortunadamente cada vez quedan menos restaurantes inclumplidores aunque en este pasado viaje a Canarias  me ha dado la impresión de que van un poco por detrás de la península ya que sí que he encontrado unos cuantos ejemplos de incumplimientos.



Pero el caso del que hablo hoy es de los que rizan el rizo, parecido a algunos pocos que me encontré en el pasado pero en este caso sin ni siquiera disimular. Se trata del restaurante La Placeta que está situado en el precioso casco antiguo de Santa Cruz de la Palma

Y digo "sin disimular" porque de entrada en la carta, los platos salados tienen el IGIC incluído pero asombrosamente los postres, no. La memoria es frágil y es posible que falle, pero no recuerdo algo así nunca. Sería interesante saber el motivo que les llevó a acabar confeccionando así la carta.

Y no acaba aquí el asombro ya que a la hora de pagar, la cuenta venía desglosada con los precios sin incluir el IGIC, por esta norma tan estúpida que no hace otra cosa que confundir al cliente y de la que el restaurante no tiene ninguna culpa, unos platos venían bien marcados ya que si se le añadía el IGIC salía el precio de carta, pero dos de ellos tenían el mismo precio que en la carta (ninguno era postre) por lo que nos cobraron dos veces el ICIG de ambos. Un cúmulo de despropósitos.




En cuanto a la cena, olvidable. Un aperitivo de la casa que fue una vinagreta, resultona para abrir boca.


De entrante tomamos un carpaccio de atún, 9,50€, mediocre para  ser suave. Éste fue uno de los que cobrarorn dos veces el IGIC. Además, queda muy cutre poner esas rebanadas de pan de molde de supermercado de descuento.



El otro plato mal cobrado fue un carré de cordero, 15,84€, que fue lo único decente de la cena aunque carísimo si tenemos en cuenta que se come de dos bocados. Eso sí, patatas, unas cuantas...







Y el magret de pato con naranja, 14,77€, fue un desastre, pasadísimo y acompañado de esas cutrepatatas de plato combinado de restaurante de tercera.






De la carta de vinos prefiero ni hablar. Tomamos un Teneguía Tinto 2013, 13,91€, que aparte de estar caliente costó "solamente" un 186,80% más que en tienda. Tremendo.

No creo que haga falta insistir en que restaurantes así no le hacen ningún favor a la hostelería canaria y española. Difícil hacerlo peor ni planeándolo.

La Placeta

Placeta de Borrero, 1, 38700 Santa Cruz de la Palma, Santa Cruz de Tenerife
922 41 52 73 www.laplaceta.es


miércoles, febrero 27, 2008

Fabiola (La Ampuyenta, Fuerteventura), por Toni


Fabiola es probablemente el restaurante más peculiar que me he encontrado en los últimos años.

Peculiar por su ubicación, en un pueblo del interior de la isla lejos relativamente de los principales centros turísticos y que además si se llega desde el sur no tiene el letrero con el nombre de la localiad y la calle tampoco. Peculiar por sus responsables, los belgas Eric Bisschop en cocina y Alexandre Van Simpsen en sala que además se encargan ellos solos de todas las tareas del restaurante y sobre todo peculiar por el propio restaurante en sí, que parece clandestino ya que no hay ningun letrero que te lleve hasta él y ni siquiera la propia casa en la que está situado tiene cartel alguno.
La casa tiene más de doscientos años y está decorada con bastante buen gusto por el propio Alexandre que era al parecer un decorador de prestigio en Bruselas.


La primera sorpresa nos llegó con la carta, que como se puede ver era un pizarra con los nombres de los platos en francés y en español.
Practican una cocina burguesa de clara influencia francesa . Los precios llevan el I.G.I.C. incluído.
Al contrario de lo que se estila habitualmente no sirvieron ningun aperitivo de la casa.




Uno de los entrantes consistió en un tartare de solomillo de añojo. 15€. Pido disculpas por la manifiestamente mejorable calidad de las fotos. Buena carne, muy bien aliñada con el toque justo picante y sorprendentemente buenos también los vegetales de la guarnición.







El otro entrante fueron unas popietas de queso cabra con curry. 14,50€. Unos ricos hojaldres rellenos de queso con una lograda salsa de curry que combinaba muy bien con el queso. Estuvo bien pero algo alto de precio.



Como principales tomamos un salteado de conejo a la vainilla. 24,50€. No es muy habitual encontrar conejo en los restaurantes españoles y sí en Francia. Este nos gustó, con un sabor más intenso de lo habitual y con el complemento de la salsa de vainilla que le viene muy bien, pero le aplico el mismo comentario que a las popietas: excesivamente caro. Ni la materia prima ni la preparación creo que justifiquen los 24,50€.



El otro plato principal fueron unas lonchas de pierna de cordero al ajo. 25€. Con este plato hubo división de opiniones. A mi mujer le gustó mucho, pero a mi, que me encanta el ajo, me pareció que éste dominaba demasiado el sabor del cordero. Muy al gusto francés, venía con una guarnición de vegetales varios.
Para los postres otra pizarra. Uno de ellos fue un pastel cremoso de chocolate. 7€. No estaba mal pero tampoco pasó de discreto. El otro fue un sorbete de queso y limón, 6€, muy correcto pero lejos de encandilar.
La carta de vinos penosa. 4 ó 5 tintos, igual en blancos, un Cava y un Champagne. Nosotros tomamos un Agustí Torelló Gran Reserva 2003. 33€. Bastante subido de precio.
Sorprendentemente la cubertería era bastante vulgar y las copas para el Cava con unos relieves bastante horteras.
Hablaba al principio de lo peculiar del restaurante, pero lo más peculiar ocurrió a la hora de pagar. La cuenta estaba escrita a mano, sin el CIF ni nada parecido en plan restaurante de menú del día de polígono industrial. Al no tener ni letrero el restaurante, tampoco había nada que dijera que aceptaban tarjetas de crédito y como nos temíamos nos dijeron que no las podían aceptar ya que como nos explicó el maitre: "estamos tan lejos de todo". Gracioso esto. Sí tienes teléfono, como es el caso, también puedes aceptar tarjetas, hombre.
Menos mal que en vacaciones siempre se lleva algo más de dinero en metálico por lo que no hubo problema, pero los más sorprendente es que a la hora de traernos la vuelta, había desaparecido la cuenta del plato. No recuerdo algo así en ningún restaurante y eso que estuve muchos años comiendo de menú del día en restaurantes de todo tipo y jamás me habían traído la vuelta sin la nota. Si sumamos esto a la falta de letreros del restaurante, no aceptación de tarjetas etc, que cada uno saque sus propias conclusiones.
En conjunto me decepcionó. Cenamos aceptablemente pero a un precio alto para lo disfrutado. No dudo que sea el mejor restaurante de Fuerteventura como dicen las principales guías, pero he estado en restaurantes parecidos en Francia y Bélgica más baratos y con mejores resultados.
Nota general: 4,5
Emoción: 5
Fabiola
C/ Real, 1 La Ampuyenta (Fuerteventura)
928 174 605


toni