lunes, diciembre 26, 2011

180 ºC (Oviedo), por Toni

Esta vez no tengo foto para el encabezamiento. El restaurante 180 ºC lleva tan poco tiempo abierto, tres semanas, que no se encuentran fotos de él en la red. Se trata del restaurante de Edgar de Miguel que anteriormente estuvo en Deloya que finalmente ha emprendido el camino por su cuenta.
El local es el de los antiguos Los 3 Caracoles y Melibea. También es bar de vinos con una carta por copas bastante decente en cuanto a referencias. Esperemos que le vaya mejor que a estos ya que a pesar de la inmejorable situación física parece que el sitio tiene algo de gafe.

Algo que deberían corregir urgentemente es la ausencia de la carta en el exterior del local. Seguro que muchos turistas que estén por la zona a la hora de comer pasarán de largo al no saber la propuesta que se pueden encontrar que es basicamente lo que se lleva en la actualidad en los gastrobares. La carta tiene un apartado de entrantes individuales, uno de entrantes a compartir, otro con platos de embutidos y platos de quesos y algún plato más y finalmente los platos principales. Por lo menos aquí si incluyen también los postres para que el comensal se haga una idea general de lo que puede pedir. Los precios con el IVA incluído, menos mal.

Nos sorprendió que no nos ofrecieran ningún aperitivo de la casa y que nos trajeran directamente los entrantes solicitados. Consistieron en una brocheta de solomillo de pato al curry, 2,20€, en tempura y agradable, yogurt de foie con plátano, 3,60€, presentado en un tarro de yogurt y muy, muy rico y un notable arroz cremoso de pitu, boletus y sepia, 3,50€ que tenía una cantidad considerable para su precio y con un resultado de muy buen nivel.

De platos principales tomamos lomo de ciervo, calabaza y setas, 16€, algo más pasado de lo solicitado pero sin arruinar la carne como en otros sitios y muy bien acompañado por la combinación de la dulzura de la calabaza y la fuerza de las setas. También venía con una especie de coca con foie-grass.

El otro plato fueron unos dados de atún con verduras, 16€, también un puntín por encima más de la cuenta y con una salsa dulce que no identificamos y no nos dimos cuenta de preguntar. En conjunto bien.

De postre pedimos el bizcocho de chocolate con sorbete de naranja, 5€, un clásico bien resuelto, aunque nos gustó más la diferente tarta de manzana 180 ºC, 5€, una reinterpretación que de Miguel hace que nos sorprendió y gustó a partes iguales.

La carta de vinos corta pero acorde con la filosofía del sitio y a precios moderados. Tomamos un Champagne Marc Hebrat Premier Crû Brut, 35€.

Algo que roza el milagro en la hostelería española es que el pan no lo cobran y además es de buena calidad. El personal de servicio un poco inexperto todavía, pero simpático, voluntarioso y amable.

Si es difícil siempre dar la opinión sobre un restaurante más en este caso que está recién abierto, pero me decidí a colgar el post porque para el poco tiempo que llevan nos sorprendió gratamente la experiencia. Cocina sin complicaciones pero efectiva, con algunos sabores muy logrados y a precios terrenales. Cuando pasen unos meses y afinen los pequeños errores típicos de la falta de rodaje puede ser un sitio muy a tener en cuenta en el mortecino panorama gastronómico de la capital. Además, con la que está cayendo, ole sus redaños por atreverse a abrir un negocio de estas características y en la zona en la que está. Recomendable.

180 ºC

C/ Jovellanos, 25, Oviedo
985 222 424


Toni

miércoles, diciembre 14, 2011

Dos restaurantes en Baeza (Jaén), por Toni


Baeza es una ciudad situada en la provincia de Jaén que junto con su vecina Úbeda forman un conjunto monumental renacentista que ha merecido la mención de Patrimonio de la Humanidad. Ni que decir tiene que es de obligada visita para cualquier viajero interesado en la arquitectura y el arte y más si también se quiere aprender algo sobre el mundo del aceite.


Como en otros post anteriores (Zafra, Oporto) iba a hablar sobre tres restaurantes, pero después del fiasco del Asador La Góndola al final se queda en dos. El primero de ellos es el restaurante La Pintada situado en el hotel Puerta de la Luna que presenta una carta de corte tradicional con platos de la tierra y alguna sorprendente incursión por tierras caribeñas. En la parte negativa, todavía no se enteraron de que los precios deben llevar el IVA incluído.




Para los entrantes pedimos una croquetas a la antigua, 8,64€, ricas, con buen relleno de jamón aunque se les pasaron ligeramente.




El ajili-mojili, 10,80€, es un plato típico jienense que al parecer tiene bastantes variantes. Aquí resultó ser un revuelto de bacalao, cebolla, patata y pimiento, servido templado. Abundante ración que llenaba bastante más de lo que parecía en un principio.




A la hora de los platos principales nos decidimos por la carne. El secreto de cerdo ibérico con salsa de piña, 15,12€, estaba un pelín más hecho de los que nos gusta y no alcanzaba el sabor de otros probados, además la salsa de piña dominaba en demasía al secreto. La guarnición de vegetales rodeados por panceta ya era antigua en los años ochenta.





Nos gustó más la carne desmechada, 12,96€, el toque caribeño del que hablaba antes que venía acompañada de tres salsas, tomate, guacamole y rosa. Muy sabrosa la carne y logradas las salsas. Bien.





Como la cena se presentó más contundente de lo que esperábamos no pedimos postre. La carta de vinos era poco más que para salir del paso. Tomamos un Pittacum 2005. 22,68€. El pan lo cobraron a 2,16€ c/u.
Como curiosidad comentar que estuvimos charlando algo con el maitre y resultó que había estado haciendo prácticas en El Corral del Indianu.

No es un sitio que quedará en el recuerdo pero si resultó bastante digno para cenar. Sin alardes pero solvente.

Las dos noches siguientes fuimos a La Taberna El Pájaro. Solo pensábamos ir una, pero después del comentado fiasco de La Góndola la última noche acabamos repitiendo casi de urgencia.
Es soprendente que a pesar de que a la entrada aparenta ser un restaurante de más enjundia por las vitrinas con mariscos y pesacados y la bodega, al entrar te encuentras un mesón típico como se puede ver en las fotos de su web con las pequeñas incomodidades que eso conlleva como los manteles y servilletas de papel, sillas no demasiado cómodas y pequeñas mesas de las que casi se salen los platos. La carta es muy abundante con mucho marisco y también platos tradicionales de la zona. Aquí sí cumplen con la información del IVA en los precios.
Como aperitivo ponen unos ricos cacahuetes tostados y unos trozos de queso muy bueno.



En ninguna de las dos noches tomamos entrantes al ver en las mesas vecinas las abundantes raciones en los platos. Muy rico el solomillo de cerdo al jerez, 15€, perfecto de punto y con una salsa intensa y sabrosa.




Algo inferior la carrillada de cerdo a la uva pasa, 14€, un poco correosa.






También buenos el choto frito (cabrito), 15€,


y el lomo de orza con huevos, 15€, rico el lomo pero sobre todo los huevos, de los que no se encuentran a menudo. Al parecer este es el plato que más venden y con diferencia según nos dijo la camarera. Como dije antes, raciones contundentes.



Como postres probamos un hojaldre típico de Baeza, los virolos, 3€, y una olvidable tarta de chocolate, 4€. El pan, 1€ c/u.

En la web del restaurante dice que tienen una gran bodega de vinos pero curiosamente en ningún momento nos ofrecieron la carta y vimos a poca gente tomar vino y básicamente por copa. Como solo pedimos un plato tomamos cerveza. La copa a 2,50€.
Ya nos había llamado la atención que en los bares de Baeza casi nadie bebía vino y cerveza era lo más consumido. No parece una zona muy consumidora de vino.

En resumen, recomendable restaurante para el turista que quiera probar la cocina autóctona bien realizada y no quedar con hambre aunque si lo juzgamos como restaurante en su conjunto tiene unos cuantos detalles manifiestamente mejorables.

La Pintada (Hotel Puerta de la Luna)
C/ Canónigo Melgares Raya, 7 23440 Baeza (Jaén)
953 74 70 19 www.hotelpuertadelaluna.com

Taberna El Pájaro
Paseo Portales Tundidores, 5 23440 Baeza (Jaén)
953 744 348 www.tabernaelpajaro.com


miércoles, diciembre 07, 2011

Asador La Góndola (Baeza, Jaén). Una nueva modalidad de tomar el pelo al cliente, por Toni


Es sorprendente la creatividad que demuestran algunos hosteleros españoles. Además en diferentes campos, ya sea para intentar burlar la ley antihumo y facilitar a los fumadores el consumo de tabaco, para saltarse la ley que obliga a incluir el IVA en los precios finales o en el caso que nos ocupa hoy, para engañar directamente al cliente.

Prefiero pensar que no es una práctica extendida pero ya no lo apostaría, porque entonces yo tengo una puntería increíble para dar con todos los jetas de España y más cuando no salgo demasiado a comer/cenar y estos sitios los descubro en los viajes que hago.

Es una lástima que no salieran las fotos que hice a la carta situada en el exterior del local debido a la poca luz y a que estaba detrás de una vitrina.
Los hechos que narro acaecieron el lunes 5 de diciembre de 2011 y lo apunto por si diera la casualidad de que algún lector fuera a este restaurante y ya no encontrara las discrepancias entre la carta del exterior y la que te dan en el comedor.

Habíamos visto en la carta del exterior un montón de platos de cocina tradicional de la zona y un menu de 30€ compuesto por unas cuantas de estas raciones y por eso nos decidimos a entrar. Una vez dentro nos llamó la atención que no nos situaran en el comedor de abajo que era amplio y solo tenía un comensal y que nos llevaran al de arriba que se puede ver en la foto del principio del post y que estaba vacío.

Poco después de sentarnos viene una camarera y nos pregunta:
"¿para beber, qué tomarán?.
Bien empezamos, pensé.
Le contesto: "cuando nos traigan las cartas y sepamos lo que vamos a cenar ya se lo decimos. Si nos puede traer la carta de vinos...".
"No tenemos carta de vinos".

Me vino a la mente aquella expresión típica de David Bisbal: "ehto e iiiiiincreíiiible", y le volví a decir que se lo decíamos después de pedir la comida.

Nos trae el que parecía algo así como el maitre las cartas y después de rebuscar arriba y abajo no encontramos por nigún lado el menú en el que nos habíamos fijado. Es más, muchos platos tenían un considrable incremento en sus precios respecto a lo que ponía la carta del exterior y en algunos casos hasta del 50% como por ejemplo las patatas baezanas que en la carta del exterior
marcaban 10€ y en la que nos dieron 15. Por supuesto, el IVA no estaba incluído en los precios. Faltaría más.

Vuelve el maitre para tomar nota y le pregunto:
"Habíamos visto en la carta del exterior un menú degustación de 30€ y aquí no aparece por ningún lado".
"Es que ya no lo tenemos".
"Pero si está compuesto por raciones que vienen todas en la carta".
"Si quieren les podemos poner las que deseen".
"Me lo imagino, pero nos interesaba ese menú para poder probar un poco de varias cosas, no tomar 3 o 4 raciones solo.
"Pues ya no lo tenemos".

Después de esta impresionante muestra de poca flexibilidad con el cliente y sobre todo de morro infinito por tener unos precios mucho más caros en la carta de comedor que en la del exterior nos levantamos y nos fuimos. Al salir y volver a examinar la carta confirmamos lo visto y nos dimos cuenta de que debía de ser la carta de 2010 ya que tenía la coletilla de "7% de IVA, no incluído" aunque tampoco está mal la inflación de un 50% en año y medio para algunos platos. Está
claro que es una práctica totalmente inaceptable.

A ver con lo que me encuentro en un futuro porque parece que tengo un imán para dar con estos garitos y sobre todo comprobando la inagotable creatividad de algunos hosteleros.

Asador La Góndola

C/ Portales Carbonería, 13, Baeza (Jaén)
Toni